El presidente de la Región Áncash, César Álvarez podría ser
detenido en las próximas horas de concretarse el pedido de prisión preventiva
en su contra que ha cursado el Procurador Anticorrupción, Christian Salas, al
Ministerio Público.
La solicitud gira en torno al caso de la Centralita, lugar
donde supuestamente se coordinaban actividades de espionaje y sicariato. Como
se recuerda, el presidente regional es sospechoso de actividades de corrupción
y asesinatos políticos contra opositores y candidatos al nuevo proceso
electoral.
Además se pide la captura y detención preventiva de: Juan
Carlos Barrios, Jorge Burgos gente de confianza del presidente y otras cuatro
personas. También indicó que denunciará a Ángel Chicle, fiscal, por
irregularidades en dos investigaciones en la mencionada región.
CÉSAR ÁLVAREZ RENUNCIÓ A LA RE-ELECCIÓN
Días antes, el actual presidente de la Región Áncash, César
Álvarez, anunció en conferencia de prensa que desistió de presentarse por
tercera vez a tentar el sillón presidencial de la región, debido a las
denuncias surgidas en su contra las últimas semanas.
Álvarez dio a conocer su decisión en una reunión convocada
para la prensa en Chimbote, ciudad donde se encuentra ubicada la sede del
gobierno regional. Él viene siendo fuertemente cuestionado por su presunta
participación en asesinatos y amenazas a varios opositores y sus familiares,
así como representantes de instituciones estatales, como el Ministerio Público.
Una de las víctimas políticas más recientes de la mafia de
Áncash fue Ezequiel Nolasco, asesinado a tiros. Previamente y en numerosas
ocasiones había recibido amenazas de muerte. Su familia clama justicia así como
resguardo policial por temor a represalias.
Mientras tanto, en la mañana de hoy domingo, Juan Calderón,
otro opositor y candidato a la presidencia de la región Áncash, fue víctima de
un atentado en el que su camioneta fue interceptada por dos sicarios que
abrieron fuego sin causar víctimas ni heridos.
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